La composición de este cuadro está llena de aciertos con una riqueza cromática que llama la atención. Las primeras casas con tejados rojos llamativos contrastan con el verde del primer plano y el azul variopinto del cielo. Como insinuación el recodo de una carrretera y en la cima las ruinas de un castillo y una torre de iglesia lejana. No se podía insinuar más y mejor un paisaje extraordinario. Enhorabuena a Alberto Rodrigo.