Recuerdo de pequeño ir a misa por la tarde, seria el rosario, seria al oscurecer y en las
piedras del sagrado dabamos golpes y saltaban chispas, me acuerdo del olor a quemado que producian. Tengo que volver a hacerlo.
Ha pasado mucho tiempo, yo eso lo he intentado hace unos años y ya no están allí aquellas
piedras, tenían gastado como un surco de tanto frotar con otra
piedra para que salieran chispas, aquel olor a quemado inolvidable. Habrá que probar en otra piedra haber si se produce el mismo efecto.