estas criaturas controladas son beneficiosas, pero cuidado acordaros de los destrozos causados por estos animalitos en las cosechas de trigo en la zona de castilla por un error de genética.
que es eso de error de genetica.?
Pues que a los listos de siempre se les ocurrió que había que dar de comer gratis y fácil a las águilas, a los córvidos y demás familia y que idea mas brillante se les ocurrió (de premio Nobel) encargaron a los laboratorios que fabricaran animalitos de estos para soltarlos en el campo y todos felices, que ocurrió?, lo previsible, una plaga de topillos que diezmó cosechas y huertos. Que hicieron los sabios?, Otro encarguito al laboratorio, esta vez para exterminio de los bichitos, a eso me refería que a la naturaleza no se la puede alterar a capricho.
Siempre me parecio una leyenda urbana.
Aporte algun dato.
Aporte algun dato.
Ahora tu eres el "Tomasín", vaya vaya.
1ª Teoría: Los topillos se crían en granjas y laboratorios secretos
No era raro escuchar comentarios en la mayor parte de los pueblos que sufren estas plagas sobre supuestas intenciones ocultas por parte de grupos ecologistas e incluso del antiguo ICONA (al que se le hace responsable aunque ya no exista), los cuales habrían criado durante años en granjas ocultas a estos roedores para posteriormente ejecutar una liberación masiva de topillos, protegidos por el Ministerio de Medio Ambiente y con un único fin “servir de alimento a las aves rapaces que se sueltan”
Esta sorprendente teoría, se mantiene latente en lo más profundo de la cultura rural actual e irrumpe cíclicamente en los pueblos castellanos coincidiendo con las plagas (es decir, cada 4-5 años).
Esta idea, completamente falsa, tiene su origen en las explosiones demográficas que sufre este roedor, es decir, en la propia dinámica poblacional, un fenómeno tan natural como las tormentas, heladas o el pedrisco. El topillo campesino tiene un comportamiento generalmente nocturno, de hábito subterráneo y bastante huidizo. Sin embargo, según se incrementa la población de este roedor, la necesidad de buscar alimento en nuevos entornos, así como la elevada densidad, produce que sea muy fácilmente detectable, creando la falsa impresión de una liberación masiva y repentina. El agricultor entonces, comienza a ver de forma repentina a este roedor, asociando su increíble presencia a un fenómeno de liberación “espontanea” bajo algún fin ecologista.
Completamente falsa, por tanto, la teoría sólo se explica porque el topillo, presente todo el año en lindes y diferentes cultivos es prácticamente indetectable.
No era raro escuchar comentarios en la mayor parte de los pueblos que sufren estas plagas sobre supuestas intenciones ocultas por parte de grupos ecologistas e incluso del antiguo ICONA (al que se le hace responsable aunque ya no exista), los cuales habrían criado durante años en granjas ocultas a estos roedores para posteriormente ejecutar una liberación masiva de topillos, protegidos por el Ministerio de Medio Ambiente y con un único fin “servir de alimento a las aves rapaces que se sueltan”
Esta sorprendente teoría, se mantiene latente en lo más profundo de la cultura rural actual e irrumpe cíclicamente en los pueblos castellanos coincidiendo con las plagas (es decir, cada 4-5 años).
Esta idea, completamente falsa, tiene su origen en las explosiones demográficas que sufre este roedor, es decir, en la propia dinámica poblacional, un fenómeno tan natural como las tormentas, heladas o el pedrisco. El topillo campesino tiene un comportamiento generalmente nocturno, de hábito subterráneo y bastante huidizo. Sin embargo, según se incrementa la población de este roedor, la necesidad de buscar alimento en nuevos entornos, así como la elevada densidad, produce que sea muy fácilmente detectable, creando la falsa impresión de una liberación masiva y repentina. El agricultor entonces, comienza a ver de forma repentina a este roedor, asociando su increíble presencia a un fenómeno de liberación “espontanea” bajo algún fin ecologista.
Completamente falsa, por tanto, la teoría sólo se explica porque el topillo, presente todo el año en lindes y diferentes cultivos es prácticamente indetectable.