hasta hoy, para mi el castillo, era lugar de paso y referencia de que pronto llegaria a sabugo despues de varias horas de viaje, gracias marilin, no se si tendre tiempo la proxima vez que pase pero quiero parar en las ventas y escuchar lo que me podais contar de esa zona tan querida como poco conocida para mi un saludo
El Castillo comenzó llamádose, Las Ventas del Castillo y Las Ventas de Santibáñez. Sólo había dos casonas que servían de acogimiento a transeúntes y arrieros. Un era la del Conde de Luna que todavía se puede ver hoy perfectamente, casi pegada al Castillo y la otra era la casa donde nací y que ostenta un hermoso escudo de la familia de "Los Buelta". Está en un enclave estratégico por ser encrucijada o cruce de caminos y por confluir los ríos Santibáñez y Omaña. La carretera de León a Cangas de Narcea, que pasa por aquí, siempre fué un arteria de gran inportancia comercial. La edificación del Castillo controlaba el paso por esta zona de todo tipo de transporte.
Omaña querida, formas parte de mi vida.
Visiten el Castillo y comprobarán que una armonía, tranquilidad, belleza y paz interior invaden con gran plenitud toda la integridad de su ser. Una envolvente aroma de claridad y pureza hace que el individuo sienta un regocijo integro y enormemente saludable. Parece como si el Cosmos acudiera presto a darle esa tonalidad de inmensidad infinita. Las horas no pasan y el tiempo se detiene en un deleite de inalcanzable reposo. Sígueme, viajero y arrastra tus pies por el tenue y sutil cesped de su alfombra enamorada de regocijo. Querida Omaña, te llevo en mi corazón a done quiera que vaya.
Castillo de Benar:! Cuando tus muros heridos y consumidos por el transcurrir de la vida, se verán embellecidos y repuestos con la grandeza y pujanza de épocas pretéritas! Cuando la generosidad del corazón humnano se compadecerá de tu dolor silente y resignado! Cuando volverán a florecer tus torres y almenas despojadas injustamente de su esplendor glorioso y triunfante!.
En Cangas de Narcea está el palacio de Omaña. Merece la pena visitarlo pues es bellísimo.! Anímese!