Sonrisas del alma pura
emoción del pensamiento
que rebosan la blancura
del amor y el sentimiento
de la especial hermosura
con que vibra este momento
a las puertas de la ermita
del Gran Cristo Magdaleno.
Evocais la paz bendita
regaláis vuestro consuelo
hacéis de la flor marchita
las rosas blancas del Cielo.
Es tanta vuestra dulzura
de ese don tan sempiterno
qie miráros es locura
y gran pecado no hacérlo.
Que delicia es contemplárlos
que placer es poder verlo
esos ángeles venidos
a la entrada de este templo.
Tavines
emoción del pensamiento
que rebosan la blancura
del amor y el sentimiento
de la especial hermosura
con que vibra este momento
a las puertas de la ermita
del Gran Cristo Magdaleno.
Evocais la paz bendita
regaláis vuestro consuelo
hacéis de la flor marchita
las rosas blancas del Cielo.
Es tanta vuestra dulzura
de ese don tan sempiterno
qie miráros es locura
y gran pecado no hacérlo.
Que delicia es contemplárlos
que placer es poder verlo
esos ángeles venidos
a la entrada de este templo.
Tavines