¡Qué ilusión! El único peral sobreviviente del "fuego bacteriano" de la huerta de los Beltrán, calle abajo ¡FLORECE! Es conocido como el de las peras de Conegunda, aludiendo a la procedencia de un injerto, hecho por Benjamina. Como bien decía Peña, hace días, la fruta de esa huerta era, es, sabrosísima.