Hola a todos y en especial a Laureanín que ha sido una sorpresa y una alegría verlo por estos lares.
El juego de bolos lo recuerdo perfectamente y muchas siestas me pasé ahí con mi amigo Anónimo tirando bolas a las dos manos. Eufronio, que alguna vez nos veía, no se podía creer que echáramos tantos dieciséis, tanto tirando las bolas a las peñas como incrustándolas en la pared de la era de Sipa a la sombra de los negrillos. La verdad es que parecía imposible que llegáramos a tener la pericia que ... (ver texto completo)
El juego de bolos lo recuerdo perfectamente y muchas siestas me pasé ahí con mi amigo Anónimo tirando bolas a las dos manos. Eufronio, que alguna vez nos veía, no se podía creer que echáramos tantos dieciséis, tanto tirando las bolas a las peñas como incrustándolas en la pared de la era de Sipa a la sombra de los negrillos. La verdad es que parecía imposible que llegáramos a tener la pericia que ... (ver texto completo)