La abundancia de arboleda y su referente latino folium, dejó el topónimo de Folloso para este linajudo pueblo
de La Lomba. El curioso viajero, que después de leer el magnífico trabajo con que Pío Cimadevilla nos ha obsequiado en su Repertorio Heráldico Leonés, contrastará in situ el hermoso escudo de los «Tu-Sin-Nos», que todavía se conserva —por poco tiempo, si alguien no lo remedia— en el frontón de un vetusto día y derruido palacio en el que se asegura que vivió la dulce Mirabrina, aquella noble omañesa que disfrutó de las mieles
del noviazgo y posteriores esposorios con el señor de Valbarca, ambos procedentes del tronco de los Tusinos, cuyas armas se remontan a los primeros blasones de La Reconquista, pues fue concedido por el propio Rey
Pelayo a uno de sus capitanes.
de La Lomba. El curioso viajero, que después de leer el magnífico trabajo con que Pío Cimadevilla nos ha obsequiado en su Repertorio Heráldico Leonés, contrastará in situ el hermoso escudo de los «Tu-Sin-Nos», que todavía se conserva —por poco tiempo, si alguien no lo remedia— en el frontón de un vetusto día y derruido palacio en el que se asegura que vivió la dulce Mirabrina, aquella noble omañesa que disfrutó de las mieles
del noviazgo y posteriores esposorios con el señor de Valbarca, ambos procedentes del tronco de los Tusinos, cuyas armas se remontan a los primeros blasones de La Reconquista, pues fue concedido por el propio Rey
Pelayo a uno de sus capitanes.