La CHOCOLATERA, esa máquina que permitía batir el chocolate mientras se fundía con el calor formando tan ansiado líquido espumoso, se introdujo en Europa a través de la corte francesa. De hecho fue María Teresa de Austria, esposa de Luis XIV quien comenzó a usarla a comienzos del siglo XVII provocando que en los años sucesivos el resto de las clases adineradas del viejo continente la usaran para conseguir chocolate en su punto perfecto de calor y cremosidad