Sin lugar a dudas, el frescor lo proporciona su construcción, adobe más adobe, y en el interior, bajando un poco, el vino en su temperatura natural, para que entre bien. Un abrazo. ¡Qué fresquito se está en la bodega! Querido amigo J. C. que bodega tan singular, si señor. Como veo que te estás volcando hacia el pueblín y de que manera, querido amigo. ¨Viva Galleguillos de Campos ¡