ENTRA EN "STARTUP DARTAGNANS" Y COLABORA EN EL CROWDFUNDING PARA RESTAURAR EL JARDIN DEL PALACIO
FRANCIA ACUDE AL RESCATE DEL PALACION DE GRAJAL, diario de león, 3 de octubre, 2020
El jardín renacentista del Palacio de Grajal de Campos es una escombrera. Hasta los años 30, en que el edificio estuvo habitado, este patio, denominado Jardín de los Olivos —porque había varios de estos árboles—, era un elemento sustancial del monumento propiedad de los condes de Vega.
Patricia Arold, técnica en Turismo del Ayuntamiento de Grajal, ha conseguido que la startup Dartagnans, que se presenta como ‘el mosquetero del Patrimonio’ en Francia y llevó a cabo la recaudación de fondos para restaurar la catedral de Notre Dame tras sufrir un descomunal incendio, tenga entre sus principales objetivos de este mes recuperar el jardín del Palacio de Grajal. Dartagnans ha ido aún más lejos: ha presentado el proyecto para salvar el jardín histórico leonés, donde crecían numerosas plantas medicinales, en las Jornadas Europeas de Patrimonio, donde ha lanzado como iniciativa solidaria la captación de donaciones para salvar el Jardín de los Olivos.
El objetivo
Con 10.640 euros se preparará el jardín y el riego, con 21.590 se hará el proyecto completo
Si la operación de rescate fracasa, al menos, el Palacio de Grajal de Campos —dice Arold— habrá tenido el honor de ser el primer monumento de España que figura en una de las plataformas en defensa del patrimonio más importantes del mundo. «Es un patrimonio maravilloso y es importante que tenga difusión internacional», dice.
La campaña de recogida de fondos, que concluye a finales de este mes, se ha marcado dos objetivos. Con 10.640 euros podrán preparar el terreno, que actualmente está lleno de socavones, podar arboles y reparar los muros que lo rodean, así como instalar el riego y drenaje. Si logran 21.590 euros, completarán el proyecto con el diseño de viales del jardín y parterres con olivos y plantas aromáticas-medicinales, además de restaurar la antigua fuente. Si no alcanzan los 2.000 euros, el dinero se devolverá a los mecenas. A partir de esa cantidad, «haremos hasta dónde alcance el dinero», afirma Arold.
En España, la Ley de Mecenazgo contempla reducciones fiscales para las donaciones destinadas a la conservación y restauración del patrimonio. Pero hay otras contrapartidas A los mecenas se les recompensará a partir de 5 euros con cartas de agradecimiento y un marcapáginas del palacio; con 10 euros, se añade una visita guiada a la localidad; con 20 euros, se suma una botella de vino de la zona; con 20 euros, una caja de galletas artesanas; y con más 100 euros, se recibe todo lo anterior y una invitación al cóctel inaugural del jardín.
En la planta baja del Palacio de Grajal de Campos se está restaurando actualmente, con una partida de 144.000 euros del Instituto Leonés de Cultura (ILC), un salón al que se pretende dar un uso cultural. Sin embargo, las vistas desde este nuevo espacio serán a una escombrera llena de zarzas y maleza. El jardín, una vez recuperado, pretende ser un espacio ‘útil’, en el que puedan descansar los peregrinos del Camino de Santiago, y para albergar eventos sociales o banquetes de bodas.
FRANCIA ACUDE AL RESCATE DEL PALACION DE GRAJAL, diario de león, 3 de octubre, 2020
El jardín renacentista del Palacio de Grajal de Campos es una escombrera. Hasta los años 30, en que el edificio estuvo habitado, este patio, denominado Jardín de los Olivos —porque había varios de estos árboles—, era un elemento sustancial del monumento propiedad de los condes de Vega.
Patricia Arold, técnica en Turismo del Ayuntamiento de Grajal, ha conseguido que la startup Dartagnans, que se presenta como ‘el mosquetero del Patrimonio’ en Francia y llevó a cabo la recaudación de fondos para restaurar la catedral de Notre Dame tras sufrir un descomunal incendio, tenga entre sus principales objetivos de este mes recuperar el jardín del Palacio de Grajal. Dartagnans ha ido aún más lejos: ha presentado el proyecto para salvar el jardín histórico leonés, donde crecían numerosas plantas medicinales, en las Jornadas Europeas de Patrimonio, donde ha lanzado como iniciativa solidaria la captación de donaciones para salvar el Jardín de los Olivos.
El objetivo
Con 10.640 euros se preparará el jardín y el riego, con 21.590 se hará el proyecto completo
Si la operación de rescate fracasa, al menos, el Palacio de Grajal de Campos —dice Arold— habrá tenido el honor de ser el primer monumento de España que figura en una de las plataformas en defensa del patrimonio más importantes del mundo. «Es un patrimonio maravilloso y es importante que tenga difusión internacional», dice.
La campaña de recogida de fondos, que concluye a finales de este mes, se ha marcado dos objetivos. Con 10.640 euros podrán preparar el terreno, que actualmente está lleno de socavones, podar arboles y reparar los muros que lo rodean, así como instalar el riego y drenaje. Si logran 21.590 euros, completarán el proyecto con el diseño de viales del jardín y parterres con olivos y plantas aromáticas-medicinales, además de restaurar la antigua fuente. Si no alcanzan los 2.000 euros, el dinero se devolverá a los mecenas. A partir de esa cantidad, «haremos hasta dónde alcance el dinero», afirma Arold.
En España, la Ley de Mecenazgo contempla reducciones fiscales para las donaciones destinadas a la conservación y restauración del patrimonio. Pero hay otras contrapartidas A los mecenas se les recompensará a partir de 5 euros con cartas de agradecimiento y un marcapáginas del palacio; con 10 euros, se añade una visita guiada a la localidad; con 20 euros, se suma una botella de vino de la zona; con 20 euros, una caja de galletas artesanas; y con más 100 euros, se recibe todo lo anterior y una invitación al cóctel inaugural del jardín.
En la planta baja del Palacio de Grajal de Campos se está restaurando actualmente, con una partida de 144.000 euros del Instituto Leonés de Cultura (ILC), un salón al que se pretende dar un uso cultural. Sin embargo, las vistas desde este nuevo espacio serán a una escombrera llena de zarzas y maleza. El jardín, una vez recuperado, pretende ser un espacio ‘útil’, en el que puedan descansar los peregrinos del Camino de Santiago, y para albergar eventos sociales o banquetes de bodas.