Según me han contado los mayores, existía la costumbre, que los "mozos", cuando había un bautizo, lanzaban esta campana, ( que es la más pequeña), hasta hacerla girar 360º sin interrupción, y que durante mi bautizo, cuando estaba lanzándola Segundino " Que Dios le tenga en la Gloria", el eje se rompió, cayendo al suelo, con la suerte de que no se produjo ninguna desgracia, ni la campana se rompió, el eje se soldó en la fragua, ( se aprecia una parte más gruesa), y hasta hoy. De esto hace ya 52 años.
Pedro San Román.
Pedro San Román.