Las bodas eran todo un acontecimiento en el que participaba el pueblo entero. Pero casi mas expectación levantaban las amonestaciones, ya que hasta entonces el asunto se debia llevar con el máximo secreto por si las moscas. Habia mas silencio en la iglesia cuando el cura leia las amonestaciones que durante el sermón. Escuchaban hasta los del coro, que siempre me he preguntado a que se dedicaban el resto de la misa...