Soy "matiega" por devoción a esta tierra, soy "matiega" por sangre paterna, soy "matiega" de corazón.
Desde muy pequeña he ido verano, tras verano a la aldea de mi padre, Licinio. Él había emigrado desde muy joven a Madrid, donde conoció a mi madre, ambos emigraron a Uruguay. Tras años en tierras americanas regresaron a Madrid, donde nací, pero también nací en La Mata de Monteagudo.
Aquí fui aprendiza de tareas del campo, ayudando a trillar en las eras, a rastrillar la hierba, a llevarla en los... Ole la virgen de la velilla y el valle del tuejar! Somos dos taranilleras, de debajo de esos grandes robles hemos comido muchas meriendas. Dios Santo, si esos robles, merenderos y muros del Santuario hablaran, tendríamos para meses de las historias que contarían. Lugareños, veraneantes, gente de paso. Pues no habrán visto y vivido cosas, y las que les quedan por vivir. Un Matiego.