LA URZ: Saludos para el pueblo hermano de la URZ (que no del...

Son las 10.00 horas, 17 de Julio de 2.010, y en La Urz las campanas tocan a hacendera ¿qué pasa?. Nada, bueno sí, que las que han organizado la comida, a través del foro del pueblo en Internet, y todas las que les ayudan quedaron en reunirse a esa hora para dar el terminar de preparar el local e ir montando las mesas.
Tienen prevista la asistencia de unos 80 comensales, que, en su mayoría, vienen de lejos, aunque todos tienen raíces en el pueblo.
Se ven venir coches por la Formiga y el Alto de la Prida. Va a ser un éxito de asistencia.
Las bebidas las habían traído el día antes, la comida va llegando con cuenta gotas, pues la han encargado en lugares distintos. Todo ello, lo van depositando en la casa de al lado del local, para su perfecta conservación.
El local, habilitado como comedor, tiene forma rectangular, es de pared con dos puertas en las peñas, cogen dos filas de mesas con sus correspondientes asientos, a ambos lados, para unas cien personas y un amplio pasillo central para el servicio.
Las gentes, según van llegando al pueblo, si dirigen a visitar a sus familiares o a ver la casa, el nabar o la huerta de sus antepasados. Ah, mira aquel cerezal lo puso yo hace... ¡qué cargado está! ¡coge, coge! ¡pela, pela!. El manzanal del a lado, lo injertó mi padre y este año parece que se ha helado la flor. La casa qué cambiada está. ¡Anda, mira! la casa de... la han rehabilitado, en el pajar de... han construido una especie de chalet, en el nabar de... menuda casa qué han mangao.......
Sobre las doce, las mesas tienen puestas los manteles los platos individuales, los cubiertos y las servilletas. La comida ya está colocada en fuentes o bandejas, según se diga. ¡Estas mozas, se lo han currado!
Las campanas tocan a misa. Lo suyo es que se tocaran por todo lo alto, es decir, volteando, además, a la vez, las dos campanas, pero nadie se fía de la seguridad del anclaje de los ejes. La tradición dice que en una reunión de este tipo debe de haberla pero, como es normal y también tradición, en La Urz va el que quiere.
Por el camino hacia la Iglesia se van encontrado y, sobre todo en el portal, un abrazo por aquí y par de besos por allá ¿Cuánto tiempo hace que no te veía? Cuarenta años, treinta, veinticinco... ¿Cómo estás? ¿Qué es de...? ¿Por dónde anda...? Perdona ¿tú quién eres? Soy el hijo de..., nieto de.... Encantado, pero no sabía que existías.
Los que participamos en este foro y no nos conocíamos físicamente, nos pusimos cara. Claro, los que asistimos, a los otros no perdemos la esperanza de ponérsela en la próxima.
La Iglesia había sido engalanada para la ocasión con flores de casa de Anita, y estaba casi llena. Alguno, para recordar, se subió al coro. En el sermón el cura destacó, desde el punto de vista cristiano, los valores de una reunión de estas características. Aplicó la celebración eucarística por los fallecidos del pueblo.
La conservación de la Iglesia, deja bastante que desear.
A la salida, a modo de Concejo, más saludos.
Y mientras caminábamos hacia el comedor, que está muy cerca, más identificaciones y recuerdos.
El sol apretaba y animaba a buscar la sombra, por lo que comenzamos a entrar en el local ¡qué fresco!.
Al mismo tiempo de casa de Olvido, salía una procesión de platos con chorizo, creo que a la sidra.
Cada uno se va sentando, donde le parece, aunque las familias tendían a agruparse, como es más que lógico, era un día especial y había que aprovecharlo.
En las mesas, había fuentes con ensalada mixta (lechuga, espárragos, tomates, bonito, huevos cocido y aceitunas); bandejas con cecina, jamón, chorizo, salchichón y queso, otras con empanada y un montón de platos con tortilla de patatas recién hechas, sí, de patatas de La Urz, con huevos de las gallinas de La Urz y que fueron donadas por los del pueblo.
Con un buen asiento, una temperatura ideal y una mesa puesta y muy bien servida y siendo las dos y media de la tarde ¿Quién se resiste a no picar? Nadie. Las organizadoras del evento y colaboradoras/es comenzaron a poner en las mesas botellas de vino fresco, cerveza, cola, naranja y limón. Amigos, aquí no se espera por nadie, cada uno se defiende como puede.
Conversaciones animadas y entrañables, risas y algún viva a las organizadoras fue transcurriendo la comida. De postre tarta y cornetes de helado, con café, chupitos variados y güisqui (whisky).
En la sobremesa, en uno de los lados empezaron a cantar canciones leonesas. Las creías recordar pero no te salían. A la próxima iremos más preparados, no para cantar porque lloverá, y nos estropea el día, pero sí para no perdernos.
A la salida de la comida se formó una especie de Calecho, unos sentados en el suelo -los poyos están a la entrada de las viviendas- otros de pie, y mas recuerdos: "Oye, te acuerdas al fondo de este local había u toro, si pero para toros la casa esa de al lado..." ¿De que casa dices que es ese mozo? Es de la del tío... su padre se fue hace sesenta años. Ahora tendrá ochenta y tantos. Tiene ochenta y siete como yo. Las conversaciones seguían... los recuerdos, siempre presentes.
Diez Diez y Tene aprovecharon para recabar información y que los expertos les precisaran determinados términos y denominaciones utilizadas en el pueblo, sobre las que tenían dudas en ese momento. Seguramente, tendrán que volver a las fuentes.
Joselin estuvo investigando qué había pasado con la gallina. Espero el informe en el foro sobre las pesquisas.
La tertulia se fue acabando, pues todo el mundo tenía algo que hacer y las cerezas estaban en su punto.
Como quedó comida en abundancia hubo cena y tras los preceptivos repiques de campana se congregaron todos. Unos pocos se tuvieron que ir por una u otra causa.
La sobremesa de la cena se convirtió en Lilandero (filandero). Claro, que en esta época no hay copón, fuso y rueca. Ahora, se está en el punto álgido de recogida de la hierba.
Permitirme decir que he disfrutado muchísimo con la reunión y agradezco a todas/os las/os que prestaron su casa, despejaron y habilitaron el local, limpiaron, montaron, sirvieron, recogieron, donaron para que se pudiera llevar a cabo y, por supuesto, a los que asistieron sobreponiéndose a alguna dificultad y a los que los han trasladado.
Las foreras (Angelines, M. A. y otras) que ideasteis la comida, la organizasteis, le disteis publicidad habéis triunfado en toda regla. Al igual que Diez Diez que daba la tabarra y chinchaba para que no se desistiera de la idea.
España ganó el Mundial 2.010, e inmediatamente después, para celebrarlo un rapacín de La Urz, tal vez acompañado de otros niños, tocó las campanas. ¡Viva La Urz y sus gentes!

Saludos para el pueblo hermano de la URZ (que no del brezo)
¿Eres periodista?......... bueno no!..... si lo fueras no contarías tan bien el encuentro
¡Enhorabuena!...... por la reunión, y sobre todo por el relato....
cuando se pone el alma en algo, se nota, claro que se nota.....
¡coñes!..... si parece que estaba yo allí....
me gustaría encontrar días de 48 horas.... ¡o mas! para leer tantas cosas interesantes que se
"ponen" por los foros de estos pueblos....

Un saludo TENE... para ti y para todos los de la URZ

................. ¡TUNDIO OMAÑA!....................