Para que no queden incompletas las imágenes de la niñez en Salce añadiré un camino lleno de polvo corriendo con otros cuantos niños y jugando con un artilugio. Éste, lo he visto en el desván de la casa de La Urz y era una especie de coche o triciclo, de madera, que me había hecho mi tío Germán, según mi madre.
En La Urz, cuando aún no había cumplido los cuatro años, recuerdo a mi abuela, la de La Urz, a grito pelao “… sácame de aquí “. Estaba metida en el llenero, que tenían a la entrada del nabar de la huerta y enfrente de la casa de Rosaura (Pili). Yo no entendía nada. Menos mal que apareció Pili y fue a buscar a la criada a casa de Benjamín (Quico) y la sacaron.
De mi abuelo guardo el recuerdo de que me protegía y andaba siempre apoyado en una cayada. Cuando murió tenía cuatro años y medio y no sabía lo que significaba la muerte.
A partir de los cinco años, de las cosas y hechos que recuerdo ya tienen imágenes, voces y sonidos, y la interpretación que les iba dando un niño.
En La Urz, cuando aún no había cumplido los cuatro años, recuerdo a mi abuela, la de La Urz, a grito pelao “… sácame de aquí “. Estaba metida en el llenero, que tenían a la entrada del nabar de la huerta y enfrente de la casa de Rosaura (Pili). Yo no entendía nada. Menos mal que apareció Pili y fue a buscar a la criada a casa de Benjamín (Quico) y la sacaron.
De mi abuelo guardo el recuerdo de que me protegía y andaba siempre apoyado en una cayada. Cuando murió tenía cuatro años y medio y no sabía lo que significaba la muerte.
A partir de los cinco años, de las cosas y hechos que recuerdo ya tienen imágenes, voces y sonidos, y la interpretación que les iba dando un niño.