En
León, también según la
costumbre extranjera, estaba situado originalmente en la cabecera, delante del
altar mayor. En el año 1746 finalmente fue trasladado al centro de la nave mayor. El arquitecto Cárdenas en el año 1915 abriría el gran
arco central con unos enormes cristales que recuperan, en parte, la vieja perspectiva de la nave central y la vista del altar mayor.
La sillería actual, quizá sustituta de una anterior, fue realizada entre los años 1461 y 1481 en estilo
gótico en madera de
nogal. Se trata de una de las sillerías más antiguas de
España. A un primer maestre Enrique, carpintero que planearía el trabajo, sucedieron Juan de Malinas y el maestro Copín, imagineros de las principales tallas (testeros y respaldos). Un riquísimo elenco de motivos congrega a los habituales personajes del Antiguo Testamento y a los
santos en los lugares más visibles, contraponiéndolos a varias figuras profanas de tono burlesco y costumbrista, a la moda nórdica. Los autores no se recataron en utilizar figuras de clérigos para satirizar vicios, en mordaces escenas que llegan a veces a la obscenidad.