El año 2009, quedará grabado en la
historia de
Lomba, porque se unió la tierra y el
cielo, para adornar los recuerdos de todos los antepasados, que a
Santa Elena llegaron durante todos los tiempos, para recoger el fervor y hallar la divina protección. A Santa Elena le pedimos con todo fervor, que nos envíe su consuelo, para que podamos ir al cielo al encuentro del Señor.