LUMAJO: Buenos días, Marisol de envidia sana, nada de nada...
Buenos días, Marisol de envidia sana, nada de nada que yo tengo envidia de la cochina, lo que daría yo por una morcillina fresca. Mariló disfrualo y no me des más envidia. Aquí hoy llueve como si nunca lo hubiera hecho. Besos y pasar buen jueves.