Mira lo de Txantxillo te va gustar, ya me contaras.
Aguri.
Entrañable Maite, gracias!
"Anteriormente, Celaya había inmortalizado su figura en un poema de 1950, resaltando su juglaría: «Yo me
río si se ríen / cuando canto mis canciones. / Por mucho que a mí me duela, / más sufren los que no comen. / Rueda que rueda que rueda, / no sé qué soy, salvo pobre, / pero hasta un Chanchillo piensa / que es más o menos un hombre / y lleva como le dejan / su vergüenza y sus dolores»."