Antes se "apalpaba", igual ó más que ahora, lo que pasa que se hacía de una forma discreta y recatada. El pajar era un lugar que encerraba mucho erotismo, y cuando entrábamos en él, acudían a nuestras mentes voluptuosidades y deseos lascivos inconfesables.
"Apalpar"-acariciar, tantear, abatir y suma y sigue.