Vamos a ver, voy a dejar una vez por todas mi opinión clara: no creo que se trate de un fraude, LA DUDA NO IMPEDIRA que yo recoga los tapones y los acerqué a una oficina de SEUR, porque si es cierto sé que con mi pequeña aportación estoy haciendo algo bueno por una persona necesitada y si no lo fuera, osea si se quisieran lucrar, pues allá ellos con su conciencia, yo por las
noches estoy en paz con mi almohada.
Tengo una
amiga que está pasando en estos momentos tambien por una situación similar,
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