La contradicción en el urogallo no es aceptable
27/08/2012
La existencia de urogallos es todo un lujo para los montes de la provincia. Es razonable que su hábitat se preserve pero todo requiere una justa medida. Y por ello es tremendamente injusto y contradictorio que se quede el urogallo fuera del reglamento sobre Comercialización de Especies Protegidas que ha elaborado recientemente la Unión Europea.
La Junta ya se ha puesto en marcha para intentar solventar el asunto y la comisión de Presidencia de las Cortes de Castilla y León ha sido convocada de urgencia para tramitar una enmienda a esta normativa con el consenso de PP y PSOE.
Pero el asunto del urogallo tiene en el caso de la provincia de León un elemento clave que hace más contradictoria si cabe la decisión de la UE de no incluir entre las 1.000 especies protegidas al urogallo. En la provincia se han paralizado explotaciones mineras y se han bloqueado proyectos de parques eólicos con una inversión conjunta que superaría los 500 millones de euros precisamente desde el conflicto suscitado por el hábitat del urogallo.
Todo ello como consecuencia de la normativa europea proteccionista que, ahora, y ahí está la gran paradoja, se olvida del urogallo en su catálogo de especies protegidas sobre las que se implanta un riguroso control para evitar su comercialización.
Es verdad que el urogallo ha perdido buena parte de su hábitat en las últimas décadas y que requiere protección pero también es cierto que en este tipo de asuntos lo exigible es rigor máximo.
27/08/2012
La existencia de urogallos es todo un lujo para los montes de la provincia. Es razonable que su hábitat se preserve pero todo requiere una justa medida. Y por ello es tremendamente injusto y contradictorio que se quede el urogallo fuera del reglamento sobre Comercialización de Especies Protegidas que ha elaborado recientemente la Unión Europea.
La Junta ya se ha puesto en marcha para intentar solventar el asunto y la comisión de Presidencia de las Cortes de Castilla y León ha sido convocada de urgencia para tramitar una enmienda a esta normativa con el consenso de PP y PSOE.
Pero el asunto del urogallo tiene en el caso de la provincia de León un elemento clave que hace más contradictoria si cabe la decisión de la UE de no incluir entre las 1.000 especies protegidas al urogallo. En la provincia se han paralizado explotaciones mineras y se han bloqueado proyectos de parques eólicos con una inversión conjunta que superaría los 500 millones de euros precisamente desde el conflicto suscitado por el hábitat del urogallo.
Todo ello como consecuencia de la normativa europea proteccionista que, ahora, y ahí está la gran paradoja, se olvida del urogallo en su catálogo de especies protegidas sobre las que se implanta un riguroso control para evitar su comercialización.
Es verdad que el urogallo ha perdido buena parte de su hábitat en las últimas décadas y que requiere protección pero también es cierto que en este tipo de asuntos lo exigible es rigor máximo.