Revuelo en Omaña por la supuesta desaparición de 35 reses del monte
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pilar infiesta | redacción 11/12/2013
La tranquilidad habitual de la que goza la población de Omaña, una de las comarcas naturales y humanas más singulares y enigmáticas de la provincia, se rompió la pasada semana tras una denuncia por la supuesta desaparición de 35 de los 67 bueyes y novillos de una explotación que pastaba en los montes de la localidad de Sabugo.
Según fuentes policiales, el encargado de la cabaña ganadera se desplazó hasta la zona para comprobar cómo se encontraban los animales, que campaban libres desde la pasada primavera en el denominado Valle Chico, y se llevó una gran sorpresa al no localizar a la mitad de las reses. Tras una búsqueda infructuosa por el amplio paraje alquilado a la junta vecinal de Sabugo, optó por denunciar, indica, «la desaparición» de los animales ante la Guardia Civil.
Las insinuaciones sobre un posible robo de las reses, cuya carne se colocaría bien en el mercado negro en estas fechas navideñas, hicieron que los agentes interrogaran a los habitantes del entorno como si fueran sospechosos, generando cierta tensión y malestar por las veladas acusaciones sobre una presunta participación en el hurto.
Escondidas
Lo curioso es que los bueyes parece que no se ‘esfumaron’ por la mano del hombre, sino por decisión de los propios animales, escondidos entre las lomas y vallejas de los agrestes parajes que dibuja el río Sabugo, un conjunto que forma parte del peine de valles laterales del Omaña. El entorno constituye un buen hábitat para decenas de animales salvajes y un buen refugio del ganado.
La investigación continúa abierta, pero parece, según confirman, que la aparición de parte del ganado denunciado cambia las tornas iniciales y dejará el incidente en uno de los muchos casos en que la dificultad para localizar a los animales hace saltar la alarma.
En el pueblo de Sabugo residen en invierno sólo dos vecinos, una pareja que asegura no haber visto nada chocante o extraño ni tampoco camiones que pudieran servir para haberse llevado a las reses para su despiece. La alcaldesa de Murias de Paredes, Carmen Mallo, también destaca que la comarca ofrece pastos de buena calidad y montes con abundantes escondr
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pilar infiesta | redacción 11/12/2013
La tranquilidad habitual de la que goza la población de Omaña, una de las comarcas naturales y humanas más singulares y enigmáticas de la provincia, se rompió la pasada semana tras una denuncia por la supuesta desaparición de 35 de los 67 bueyes y novillos de una explotación que pastaba en los montes de la localidad de Sabugo.
Según fuentes policiales, el encargado de la cabaña ganadera se desplazó hasta la zona para comprobar cómo se encontraban los animales, que campaban libres desde la pasada primavera en el denominado Valle Chico, y se llevó una gran sorpresa al no localizar a la mitad de las reses. Tras una búsqueda infructuosa por el amplio paraje alquilado a la junta vecinal de Sabugo, optó por denunciar, indica, «la desaparición» de los animales ante la Guardia Civil.
Las insinuaciones sobre un posible robo de las reses, cuya carne se colocaría bien en el mercado negro en estas fechas navideñas, hicieron que los agentes interrogaran a los habitantes del entorno como si fueran sospechosos, generando cierta tensión y malestar por las veladas acusaciones sobre una presunta participación en el hurto.
Escondidas
Lo curioso es que los bueyes parece que no se ‘esfumaron’ por la mano del hombre, sino por decisión de los propios animales, escondidos entre las lomas y vallejas de los agrestes parajes que dibuja el río Sabugo, un conjunto que forma parte del peine de valles laterales del Omaña. El entorno constituye un buen hábitat para decenas de animales salvajes y un buen refugio del ganado.
La investigación continúa abierta, pero parece, según confirman, que la aparición de parte del ganado denunciado cambia las tornas iniciales y dejará el incidente en uno de los muchos casos en que la dificultad para localizar a los animales hace saltar la alarma.
En el pueblo de Sabugo residen en invierno sólo dos vecinos, una pareja que asegura no haber visto nada chocante o extraño ni tampoco camiones que pudieran servir para haberse llevado a las reses para su despiece. La alcaldesa de Murias de Paredes, Carmen Mallo, también destaca que la comarca ofrece pastos de buena calidad y montes con abundantes escondr
que las busque por aqui
¿Que seguro que las encuentra?