Hacer madreñas para hincar los pies a la tierra, para echar raíces y no despegarse de Tierruca, la madera supone para los montañeses, el sustento, el cobijo, la magia, la espiritualidad y la vuelta a la tierra.
Recuerdo el taller de mi abuelo en el que no faltaba herramienta escrupulosamente ordenada para fabricar cualquier cosa,
puerta,
ventanas, escaños y todo tipo de muebles.
Estando Cándido en su leñero preparando una buena calliza para madreñas, la zuela resbalo por la dura y lisa superficie
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