Es una villa
medieval enclavada bajo la protección de la peña del Cubichón, antiguo emplazamiento de lo que parece haber sido un importante castro celta de la Edad del Hierro.
Fue cabeza del partido judicial más grande de la provincia, pero entró en decadencia en el último cuarto del siglo XX, cuando comenzó a disminuir la población y comenzaron a desaparecer las instituciones que albergaba progresivamente.