Tiene una leyenda en el origen de su nombre:
Noceda y
Saceda eran dos poblados prerrománicos y en su enfrentamiento con los
romanos, estos acordaron que era conveniente abandonar Saceda (de si-ceda) y hacerse fuertes en Noceda, más alto y mejor resguardado (de no-ceda) y allí resistir la legión
romana.