Yo también formo parte de este bello lugar, en el que pasaba todos los
veranos de mi infancia.
Las
campanas de la
iglesia siguen sonando todas las semanas, pero nunca volvieron a sonar como las tocaba , Adolfo.
Desde esta wed quiero mandar un recuerdo a todos los que nos dejaron y que formaban parte del
pueblo, ellos eran el pueblo.