CAZADOR QUE VAS CAZANDO (í. a)
(La Infantina + Caballero burlado + Hermana cautiva
Cazador que vas cazando,
cazando de noche y día.
Los perros iban cansados,
la caza no parecía.
Se ha parado a descansar
al tronco de una hermosa encina.
El tronco era de oro,
las ramas de plata fina
y en la cogolla más alta
y había una hermosa niña
con una mata de pelo
que toa la encina cubría.
—No te asustes, cazador,
que soy una hermosa niña
que en el vientre de mi madre
me maldijo una tia mía
que tenía que estar penando
siete año (h) en esta encina
y hoy los cumplo, cazador,
al punto de mediodía.
Si me quieres esperar,
iremos en compañía.
— ¿Dónde montaré a mi bella,
dónde montaré a mi blanca?
—Y en las jancas del caballo
para mayor honra mía.
Y a la mitad del camino,
la niña se sonreía.
— ¿Por qué sonríes, mi bella?
¿Por qué sonríes, mi blanca?
—Me río de ti, cazador,
que las espuelas se te olvidan.
Mi padre fabrica el oro,
mi madre la plata fina
y un hermanito que tengo
se dedica a cacería.
—Abrir puertas y ventanas,
balcones y galerías.
Creí que traía una novia
y traigo a una hermana mía.
(La Infantina + Caballero burlado + Hermana cautiva
Cazador que vas cazando,
cazando de noche y día.
Los perros iban cansados,
la caza no parecía.
Se ha parado a descansar
al tronco de una hermosa encina.
El tronco era de oro,
las ramas de plata fina
y en la cogolla más alta
y había una hermosa niña
con una mata de pelo
que toa la encina cubría.
—No te asustes, cazador,
que soy una hermosa niña
que en el vientre de mi madre
me maldijo una tia mía
que tenía que estar penando
siete año (h) en esta encina
y hoy los cumplo, cazador,
al punto de mediodía.
Si me quieres esperar,
iremos en compañía.
— ¿Dónde montaré a mi bella,
dónde montaré a mi blanca?
—Y en las jancas del caballo
para mayor honra mía.
Y a la mitad del camino,
la niña se sonreía.
— ¿Por qué sonríes, mi bella?
¿Por qué sonríes, mi blanca?
—Me río de ti, cazador,
que las espuelas se te olvidan.
Mi padre fabrica el oro,
mi madre la plata fina
y un hermanito que tengo
se dedica a cacería.
—Abrir puertas y ventanas,
balcones y galerías.
Creí que traía una novia
y traigo a una hermana mía.