Adiós al guardián de San Isidoro
Antonio Viñayo, alma de la Real Colegiata, incansable investigador y divulgador de lo leonés, murió ayer a los 90 años dejando tras de sí medio centenar de libros y toda una vida dedicada al conocimiento y a la fe.
Antonio Viñayo, alma de la Real Colegiata, incansable investigador y divulgador de lo leonés, murió ayer a los 90 años dejando tras de sí medio centenar de libros y toda una vida dedicada al conocimiento y a la fe.
C. fanjul/ e. gancedo | león 14/12/2012
Adiós al sabio. Al defensor incansable de la Colegiata de San Isidoro, arca de los tesoros del Viejo Reino. Al investigador concienzudo, perfeccionista, preciso. A ese sacerdote tan firme...