¡Y TAN POBRE, PERO QUE RICO!
Desde luego que ese ya no hace más cochinadas.
Apuntarse a
comer, nos ha fastidiao, yo también y además desde el minuto "cero" en que le dan la vuelta en el banco. Alguien nos podría contar como dieron cuenta de las pezuñas, rabo y orejas, ahí sobre la marcha.
En cuento a la fecha elegida para la
matanza, creo que acertaron de lleno con el tiempo. Ahora sí se curará bien todo lo que se tiene que curar. Buen provecho a todos los que les haya tocado algo.
El frío es
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