Cuando nos asalta un aguijón de abeja,
acompaña gestos de dolor y queja
hielo, que suspenda; no haya inflames.
- ¡En las manos sonrisas y puñales!
acompaña gestos de dolor y queja
hielo, que suspenda; no haya inflames.
- ¡En las manos sonrisas y puñales!