A TRAVéS DE LA VENTANA (casa las eras)
Imponente y desnuda,
Se me aparecía la Cuesta,
Cuando tierno y débil abría,
Con pereza mis ojos encendidos,
De niño pobre cada mañana.
Había un limpio
Paisaje árido y virgen
De ternura y amores frescos,
Reglones torcidos,
Versos inocentes y
Aún sin cincelar
Y, por lo mismo, no contaminados.
Ahora los pianres verdes,
Grises, oscuros y densos
Cubren los secretos recuerdos de niño,
Que gustaría traer a la memoria,
Y lo impide este horrible
Tejido convencional
De troncos sin amor
Y púas sin encanto.
Esta doliente nube
De púas grises y oscuras
Cubre el dolor de una biografía
Tierna y distante que ahora
Veo caer por el tronco
En forma de lágrimas de resina.
Alfredo Marcos Oteruelo.
Imponente y desnuda,
Se me aparecía la Cuesta,
Cuando tierno y débil abría,
Con pereza mis ojos encendidos,
De niño pobre cada mañana.
Había un limpio
Paisaje árido y virgen
De ternura y amores frescos,
Reglones torcidos,
Versos inocentes y
Aún sin cincelar
Y, por lo mismo, no contaminados.
Ahora los pianres verdes,
Grises, oscuros y densos
Cubren los secretos recuerdos de niño,
Que gustaría traer a la memoria,
Y lo impide este horrible
Tejido convencional
De troncos sin amor
Y púas sin encanto.
Esta doliente nube
De púas grises y oscuras
Cubre el dolor de una biografía
Tierna y distante que ahora
Veo caer por el tronco
En forma de lágrimas de resina.
Alfredo Marcos Oteruelo.