A finales de los años 70 -marzo de 1979- de un proyecto social y cultural por parte del Centro “Virgen de Biforcos” en Quintanilla de Losada salió a la luz una revista de frecuencia bimensual con el nombre de SERANO, “la vieja palabra cabreiresa evocadora de las tertulias en las largas noches invernales”, en palabras de su Director, Manuel Garrido. “Su estructura fue pensada para desarrollar dos líneas fundamentales; por una parte, el tratamiento de los temas de mayor importancia local, como la sanidad, la educación y la escuela, la participación ciudadana en la administración municipal y vecinal, el cuidado de la naturaleza. En segundo lugar, la reflexión sobre el ser mismo de Cabrera, definido en la tradición y en los acontecimientos de la historia y también mágicamente expresado en las leyendas y narraciones populares”. Según Concha Casado “la revista Serano fue un aldabonazo para la valoración del patrimonio cultural de la Cabrera que, bajo las cenizas de un aparente abandono, mantenía vivo el rescoldo”. Durante tres años y cinco meses salió a la calle en 22 ocasiones con una tirada media de 600 ejemplares, la mitad de los cuales salían de Cabrera en busca de los emigrantes. Sin duda que sirvió como vehículo de comunicación y medio para aunar esfuerzos. Esta revista había tenido una predecesora llamada “EL CATALEJO” fundada por un medico de la zona que con una docena de copias manuscritas se repartían a los curas y a los maestros.