PUENTE ALMUHEY: Deja que tu pecho...

Deja que tu pecho
temple mi espalda
del frío de la noche,
que tus brazos abracen
mi cuerpo desnudo
desterrando mi soledad
sosegando mi sueño.

He notado tu voz
recorrer mi piel
y cómo se estremecía
mi alma
con tu cálido aliento.

No quiero que acabe la noche.
No quiero que amanezca el día.

La luz apagará la magia
que guarda las cálidas sábanas
que cubren nuestros cuerpos desnudos.

Siento como tus manos
recorren mi torso
tímidamente
descendiendo suaves por mi pecho
hasta envolver mi cintura.

Ahora mis ojos
han encontrado los tuyos
y nuestros labios
se han fundido cálidos
nuestro pecho es uno
nuestro cuerpo es uno
yo soy uno contigo
y tu eres una conmigo
mientras la noche traicionera
avanza hacia el amanecer
mientras las sombras
salen al encuentro de la luz.

Ya no existe el tiempo
todo se ha detenido
en este instante.