Entra un borrachete en una
cafetería y dice, celebrando, con voz balbuceante:
¡
Felíz año nuevo!
A lo que una dama le contestó:
¿Felíz año nuevo? ¿en pleno abril?
y dice el borrachete:
¿Ya estamos en abril? ¡Ay, mi mujer me va ha matar, nunca había llegado tan tarde!