PUENTE ALMUHEY: He soñado tu cuerpo...

He soñado tu cuerpo
abrazado a la luna
y he deseado convertirme en estrella
para cubrir tu delicada piel
con la luz más bella
que la noche te pudiera ofrecer.

He soñado el sonido limpio
de las aguas salvajes
de los arroyos de invierno
que antaño descendían libres
por barrancos y cañadas
en busca de los campos
ya preñados de primavera
que fueron testigos de nuestras caricias
y de nuestros fugaces besos.

Puedo despertar y no quiero
pues despertar sería perderte
como ya te perdí entonces
y soñarte es vivir
como ya te viví entonces.

Deja que la frágil piel de mis palabras
acaricie suave tus sentidos
mientras tus labios aún dormidos
susurran incontables ‘te quieros’
con los que el viento de la noche
recorre la Vía Láctea de nuestros cuerpos.

Quiero despertar y no puedo
pues mi alma vive y sueña
cuando mi cuerpo duerme y se ausenta
es ella la verdadera dueña
de mis velas y desvelos
pues me permite seguir viviendo
el ensueño de este sueño.