PUENTE ALMUHEY: Estando un pastor un día...

Estando un pastor un día
sentadito en su majada
«vido» venir a una loba
derechita a su manada.
— Vuélvete, loba, lobita,
que aquí no adelantas nada,
que tengo siete cachorros
y una perra entrevillana;
ni le temo a tus cachorros
ni a tu perra entrevillana.
Ha dado la media vuelta
no ha podido pescar nada,
ha dado la otra media
pescó una cordera blanca.
Ha corrido siete leguas
por los cerros y cañadas,
al saltar el arroyuelo
le echaron mano a una pata.
— Tomad, perros, la cordera,
sana y buena como estaba.
No queremos la cordera
de tu boca alobadada,
que queremos tu pelleja
«pa» el pastor una zamarra,
el rabo para correas
para atacarse las bragas,
de la cabeza un zurrón
para meter las cucharas,
las tripas para vihuela
para que bailen las damas.