Rebanada de pan candeal recién horneada
cubierta de manteca o vino
nevada de azúcar blanca
merienda de niño
en las tardes segovianas
recuerdos de una infancia
ya lejana
que revive los sentidos
con los sabores de una vida.
Cuántas meriendas
cuántos sueños
cuántas palabras
cuántos cuentos
cuántas historias
cuántas experiencias compartidas
abuelo.
Me enseñaste
la sencillez de las cosas importantes
el valor de la palabra dada
el abrazar de manos para cerrar un trato
el mirar a los ojos con el corazón abierto
a reírme con el mundo
a decir desde el corazón ‘te quiero’.
Partiste
cuando decidieron que partieras
pues llegaste
cuando decidieron que llegaras
nadie nos pregunta
cuándo queremos llegar
y nadie nos pregunta
cuándo queremos partir.
Entre tu llegada
y tu partida
toda una vida
para llenarla de recuerdos
alimentos de una tierra
sobre los que enraizar mi alma
frutos de primavera
cuelgan
libres
bajo sus ramas.
Un mañana partiré
lo sé
si bien
no sé si estarás esperando mi llegada
si alguien estará esperando
mi llegada
mi llegada.
Me gustaría llevarme tu recuerdo
para poder pensarte
cuando las sombras
den sombra a mi sombra
y abrazar así tu sueño.
cubierta de manteca o vino
nevada de azúcar blanca
merienda de niño
en las tardes segovianas
recuerdos de una infancia
ya lejana
que revive los sentidos
con los sabores de una vida.
Cuántas meriendas
cuántos sueños
cuántas palabras
cuántos cuentos
cuántas historias
cuántas experiencias compartidas
abuelo.
Me enseñaste
la sencillez de las cosas importantes
el valor de la palabra dada
el abrazar de manos para cerrar un trato
el mirar a los ojos con el corazón abierto
a reírme con el mundo
a decir desde el corazón ‘te quiero’.
Partiste
cuando decidieron que partieras
pues llegaste
cuando decidieron que llegaras
nadie nos pregunta
cuándo queremos llegar
y nadie nos pregunta
cuándo queremos partir.
Entre tu llegada
y tu partida
toda una vida
para llenarla de recuerdos
alimentos de una tierra
sobre los que enraizar mi alma
frutos de primavera
cuelgan
libres
bajo sus ramas.
Un mañana partiré
lo sé
si bien
no sé si estarás esperando mi llegada
si alguien estará esperando
mi llegada
mi llegada.
Me gustaría llevarme tu recuerdo
para poder pensarte
cuando las sombras
den sombra a mi sombra
y abrazar así tu sueño.
Este poema es de los que yo llamo especiales, que bonito, me sorprendes todas las semanas, que grande eres. Un saludo. Marimar