Playas desiertas de muerte
preñadas de sueños
familias reunidas
risas de niñas y niños
a las orillas de un mar
que ríe con los juegos infantiles
de un futuro que está por llegar
silba el viento
una vez
nubes bajo el azul del cielo
parecen presagiar lo evitable…
explosión en el muelle cercano
carreras por la arena
huída ante la desesperación del hombre.
Silba de nuevo el viento
otra vez
estruendo de muerte
rompe el firmamento
cuatro cuerpos mutilados
de una misma familia
alfombran el campo de juego
ahora campo de muerte
cuerpos heridos gritan el dolor
de la indecencia y la desesperanza
Mohammed Baker
trece años
Ahed Baker
diez años
Zakareya Baker
diez años
Mohammed Baker
once años.
Ya no ríe el mar
ya no ríen las olas
ya no ríe el viento
gritos de dolor y muerte
gritos de impotencia y soledad
gritos de incomprensión e injusticia
recorren la playa huérfana
de sueños y esperanzas.
¿Dónde está el mundo
que permite la masacre continuada
de un pueblo indefenso?
¿Dónde la justicia
de los hombres?
¿Dónde la justicia divina?
No creo en sus dioses
no creo en los dioses
que permiten y toleran
la muerte impune de inocentes
no creo en pueblos elegidos
ni en quienes les apoyan
a mano alzada
o en silencio
no creo en ti hombre o mujer
que callas cuando la muerte reina.
preñadas de sueños
familias reunidas
risas de niñas y niños
a las orillas de un mar
que ríe con los juegos infantiles
de un futuro que está por llegar
silba el viento
una vez
nubes bajo el azul del cielo
parecen presagiar lo evitable…
explosión en el muelle cercano
carreras por la arena
huída ante la desesperación del hombre.
Silba de nuevo el viento
otra vez
estruendo de muerte
rompe el firmamento
cuatro cuerpos mutilados
de una misma familia
alfombran el campo de juego
ahora campo de muerte
cuerpos heridos gritan el dolor
de la indecencia y la desesperanza
Mohammed Baker
trece años
Ahed Baker
diez años
Zakareya Baker
diez años
Mohammed Baker
once años.
Ya no ríe el mar
ya no ríen las olas
ya no ríe el viento
gritos de dolor y muerte
gritos de impotencia y soledad
gritos de incomprensión e injusticia
recorren la playa huérfana
de sueños y esperanzas.
¿Dónde está el mundo
que permite la masacre continuada
de un pueblo indefenso?
¿Dónde la justicia
de los hombres?
¿Dónde la justicia divina?
No creo en sus dioses
no creo en los dioses
que permiten y toleran
la muerte impune de inocentes
no creo en pueblos elegidos
ni en quienes les apoyan
a mano alzada
o en silencio
no creo en ti hombre o mujer
que callas cuando la muerte reina.