Es especialmente el otoño
el que gusta de acompañar
mis recuerdos
quizá por las largas tardes
quizá por las tempranas madrugadas
nada ocurre sin razón alguna.
Dejo que afloren
y sorprendo la sonrisa
asomada a mi rostro
les acerco a mi presente
mientras dibujan nubes multiformes
en el cielo azul que les acompaña.
La inmortalidad del Ser Humano
habita en la memoria de sus semejantes.
Dejo que entren y salgan
a su antojo
la verdad la sencillez y la libertad
son ahora sus compañeros de viaje
mientras yo aguardo que aparezcan
sentado en el andén de mis sueños.
Con ellos vivo lo que otros vivieron
con ellos siento lo que otros sintieron
ellos y yo y yo con ellos
volvemos a encontrarnos
para no olvidarnos de que en otro tiempo
caminamos la misma senda
bajo la misma noche
bajo las mismas estrellas.
José Manuel Contreras
el que gusta de acompañar
mis recuerdos
quizá por las largas tardes
quizá por las tempranas madrugadas
nada ocurre sin razón alguna.
Dejo que afloren
y sorprendo la sonrisa
asomada a mi rostro
les acerco a mi presente
mientras dibujan nubes multiformes
en el cielo azul que les acompaña.
La inmortalidad del Ser Humano
habita en la memoria de sus semejantes.
Dejo que entren y salgan
a su antojo
la verdad la sencillez y la libertad
son ahora sus compañeros de viaje
mientras yo aguardo que aparezcan
sentado en el andén de mis sueños.
Con ellos vivo lo que otros vivieron
con ellos siento lo que otros sintieron
ellos y yo y yo con ellos
volvemos a encontrarnos
para no olvidarnos de que en otro tiempo
caminamos la misma senda
bajo la misma noche
bajo las mismas estrellas.
José Manuel Contreras