Pedir perdón
es el primer paso que quiero dar
para retomar el camino perdido
perdonarme
y perdonarte
para después poder abrazarte
y decirte todo lo que te he extrañado
todo lo que te echado de menos
cuando no tenía rumbo
ni puerto al que arribar.
Quizá no estuviera acostumbrado
a pedir perdón
ni a perdonarte
ni a perdonarme
sin embargo qué sencillo resulta
levantarse una mañana
con la decisión tomada
y pronunciar tan sencilla palabra
escuchando el sincero latido de tu corazón
cual si fuera la melodía de una canción
susurrándote que esta es tu mejor decisión.
Pedir perdón
por los errores cometidos
y los silencios forzados
perdonarme
y perdonarte
caminar ligero de equipaje
sin mochilas cargadas de asuntos pendientes
atendiendo primero a lo más reciente
y desoyendo ese ego siempre presente.
Pedir perdón
respirando libre y sin complejos
ante el regalar de la vida
cuando amanece
perdonarte
y perdonarme
reaprender a perseguir los sueños
que otro tiempo creí negados
mas toda tormenta precede a la calma
y mirando tras las ventanas del alma
descubrir lo que la vida en verdad me reclama
dejar de lamentarme por lo “no hecho”
y caminar por el sendero elegido
desoyendo palabras sin sentido
para poder descubrir a qué he venido.
José Manuel Contreras
es el primer paso que quiero dar
para retomar el camino perdido
perdonarme
y perdonarte
para después poder abrazarte
y decirte todo lo que te he extrañado
todo lo que te echado de menos
cuando no tenía rumbo
ni puerto al que arribar.
Quizá no estuviera acostumbrado
a pedir perdón
ni a perdonarte
ni a perdonarme
sin embargo qué sencillo resulta
levantarse una mañana
con la decisión tomada
y pronunciar tan sencilla palabra
escuchando el sincero latido de tu corazón
cual si fuera la melodía de una canción
susurrándote que esta es tu mejor decisión.
Pedir perdón
por los errores cometidos
y los silencios forzados
perdonarme
y perdonarte
caminar ligero de equipaje
sin mochilas cargadas de asuntos pendientes
atendiendo primero a lo más reciente
y desoyendo ese ego siempre presente.
Pedir perdón
respirando libre y sin complejos
ante el regalar de la vida
cuando amanece
perdonarte
y perdonarme
reaprender a perseguir los sueños
que otro tiempo creí negados
mas toda tormenta precede a la calma
y mirando tras las ventanas del alma
descubrir lo que la vida en verdad me reclama
dejar de lamentarme por lo “no hecho”
y caminar por el sendero elegido
desoyendo palabras sin sentido
para poder descubrir a qué he venido.
José Manuel Contreras