Dos corazones palpitando
con la lógica arritmia
del que comienza un camino
junto al que ya tiene camino andado
una sístole por dos diástoles
o una diástole por tres sístoles
qué más dará
si las matemáticas no entienden de pálpitos
tan solo de ritmos y de teoremas
y de propiedades…
no de las que atesora el hombre
para enriquecerse
sino de las que conforman
muerte y vida
en la senda que cada cual elige.
Aún recuerdo ese palpitar
tan tuyo que siempre sentí mío
pues aprendí a seguirlo
al igual que la luna acompaña el girar de la tierra
o el tronar del trueno sigue al luminoso rayo
cuando aparece la tormenta.
Entorno mis ojos
y escuchando el silencio
entre los latidos de este mi corazón
me encuentro con el palpitar del tuyo
que atempera
el desbocado vivir
que a veces me conduce a ninguna parte
retomo de nuevo el camino
una diástole por una sístole
o una sístole por una diástole
quizá y después de todo no dé igual.
José Manuel Contreras
con la lógica arritmia
del que comienza un camino
junto al que ya tiene camino andado
una sístole por dos diástoles
o una diástole por tres sístoles
qué más dará
si las matemáticas no entienden de pálpitos
tan solo de ritmos y de teoremas
y de propiedades…
no de las que atesora el hombre
para enriquecerse
sino de las que conforman
muerte y vida
en la senda que cada cual elige.
Aún recuerdo ese palpitar
tan tuyo que siempre sentí mío
pues aprendí a seguirlo
al igual que la luna acompaña el girar de la tierra
o el tronar del trueno sigue al luminoso rayo
cuando aparece la tormenta.
Entorno mis ojos
y escuchando el silencio
entre los latidos de este mi corazón
me encuentro con el palpitar del tuyo
que atempera
el desbocado vivir
que a veces me conduce a ninguna parte
retomo de nuevo el camino
una diástole por una sístole
o una sístole por una diástole
quizá y después de todo no dé igual.
José Manuel Contreras