Quizá el silencio
sea la mejor conversación
tan solo si dejamos que su eco
acompañe el latido de vida
que palpita en cada uno de nuestros sueños.
Silencio roto por conversaciones pendientes
con nosotros mismos
silencio que se acomoda a nuestro lado
aliándose con un tiempo
que cabalga desbocado
en este siglo que habitamos.
Atrévete a romper ese silencio
que atenaza tus palabras
ahora que el tiempo parece
concedernos un respiro
no se detiene
como no se detiene la vida y la muerte
en su simpar singladura
tan solo pretende aparentarlo
mientras retiene nuestro futuro
junto a este cruel aliado.
Quizá no sea el mismo
cuando regrese lo que aún no ha llegado
pero seguro estoy de que no volverá
lo que antes tenía
cuando creía tenerlo todo
y realmente nada poseía.
Sé que regresarán los abrazos
y volverán mis brazos a abrazar
y mi cuerpo a ser abrazado
al igual que regresan las estaciones
y la noche cuando parte el día
sé que regresarán los besos
y volverán mis labios a besar
y mis labios a ser besados
todo regresará de nuevo
pero quizá nosotros
no regresemos los mismos.
José Manuel Contreras
sea la mejor conversación
tan solo si dejamos que su eco
acompañe el latido de vida
que palpita en cada uno de nuestros sueños.
Silencio roto por conversaciones pendientes
con nosotros mismos
silencio que se acomoda a nuestro lado
aliándose con un tiempo
que cabalga desbocado
en este siglo que habitamos.
Atrévete a romper ese silencio
que atenaza tus palabras
ahora que el tiempo parece
concedernos un respiro
no se detiene
como no se detiene la vida y la muerte
en su simpar singladura
tan solo pretende aparentarlo
mientras retiene nuestro futuro
junto a este cruel aliado.
Quizá no sea el mismo
cuando regrese lo que aún no ha llegado
pero seguro estoy de que no volverá
lo que antes tenía
cuando creía tenerlo todo
y realmente nada poseía.
Sé que regresarán los abrazos
y volverán mis brazos a abrazar
y mi cuerpo a ser abrazado
al igual que regresan las estaciones
y la noche cuando parte el día
sé que regresarán los besos
y volverán mis labios a besar
y mis labios a ser besados
todo regresará de nuevo
pero quizá nosotros
no regresemos los mismos.
José Manuel Contreras