He querido fotografiar
con mi mirada
el apasionado beso
de la mar brava
y el cielo en calma
en la imaginaria línea de tu horizonte.
He querido fotografiar
con mi mirada
la lágrima furtiva
que recorriendo tu rostro,
hasta la comisura de tus labios,
se funde con el olvido
de aquellos lejanos “te quiero”.
He querido fotografiar
con mi mirada
aquella noche sin estrellas
y huérfana de luna
en el que tu luz
dibujó las sombras
de una anunciada despedida
que no supo desandar
el camino recorrido.
He querido fotografiar
con mi mirada
toda una vida
de decisiones erradas
y de acertadas opciones
sin darme cuenta, hasta ahora,
de que vivía con los ojos cerrados
y el corazón entre mis manos.
José Manuel Contreras
con mi mirada
el apasionado beso
de la mar brava
y el cielo en calma
en la imaginaria línea de tu horizonte.
He querido fotografiar
con mi mirada
la lágrima furtiva
que recorriendo tu rostro,
hasta la comisura de tus labios,
se funde con el olvido
de aquellos lejanos “te quiero”.
He querido fotografiar
con mi mirada
aquella noche sin estrellas
y huérfana de luna
en el que tu luz
dibujó las sombras
de una anunciada despedida
que no supo desandar
el camino recorrido.
He querido fotografiar
con mi mirada
toda una vida
de decisiones erradas
y de acertadas opciones
sin darme cuenta, hasta ahora,
de que vivía con los ojos cerrados
y el corazón entre mis manos.
José Manuel Contreras