Esta es la actual vista desde el
camino de los
lavaderos con el
puente al fondo. Antes esa zona eran prados de gente del
pueblo, siempre huele a menta y fescor, el sonido del
agua relaja en los días calurosos, cerca está la
iglesia del pueblo, un pequeño
parque y el
mesón. Si vas por ahí merece la pena un alto en el camino.