
VILLABLINO / Educación
La falta de presupuesto reduce a la mitad los cursos de verano
Unitínere cambia de sede y se traslada a la Sierra Norte de Madrid
Los cursos se imparten en las instalaciones de la Fundación Sierra Pambley. L. VILLA
Lidia de la Villa Villablino
Los recortes presupuestarios que ha tenido la Universidad Carlos III de Madrid, unido al déficit que viene arrastrando el programa de verano, ha motivado que los cursos de este 2009 se vean reducidos a la mitad.
Este verano, los seminarios se concentrarán en las últimas dos semanas de julio mientras que otros años los cursos abarcaban las cuatro semanas del mes durante las que se impartían un total de 11 seminarios de 30 horas de duración y un taller de fin de semana con una carga lectiva de 20 horas de duración.
Este recorte en el programa coincide con el décimo aniversario de esta iniciativa académica que la Carlos III, junto con el Ayuntamiento de Villablino ponían en marcha en julio de 1999.
A esta iniciativa se sumó, posteriormente, la Universidad de León así como la Fundación Sierra Pambley, cuyas instalaciones en Villablino son la sede del programa de verano. Aunque durante un par de años los cursos se impartieron en la Casa de Cultura.
Desde aquel lejano 1999 han pasado por los cursos de verano unos 3.500 alumnos así como cientos de profesores. Y es que la media de participación en los cursos es de 300 estudiantes por año, excepto en 2003, 2004 y 2005 donde el número de alumnos llegó a superar los 400 pues, esos tres veranos, se impartieron además de los seminarios de 30 horas de duración, talleres de fin de semana.
En las últimas tres ediciones sólo se mantenía el taller de música a cargo del tenor Enrique Viana y que coincidía con los encuentros musicales que el escultor y pintor, Eduardo Arroyo, organiza el último fin de semana de julio en Robles de Laciana.
Y mientras el programa de verano se mantiene, no sucede lo mismo con Unitínere, el Encuentro Universitario Itinerante de Artes Escénicas que, después de seis años acercando el mejor teatro a los pueblos de Laciana, este año cambia de sede y los ‘tratantes de sueños’ levantaran el telón en los pueblos de la Sierra Norte de Madrid, del 23 de julio al 1 de agosto.
Una noticia que, a buen seguro, caerá como un jarro de agua fría entre los habitantes de los pueblos de la comarca que, cada verano, recibían con los brazos abiertos la llegada de Unitínere.
La falta de presupuesto reduce a la mitad los cursos de verano
Unitínere cambia de sede y se traslada a la Sierra Norte de Madrid
Los cursos se imparten en las instalaciones de la Fundación Sierra Pambley. L. VILLA
Lidia de la Villa Villablino
Los recortes presupuestarios que ha tenido la Universidad Carlos III de Madrid, unido al déficit que viene arrastrando el programa de verano, ha motivado que los cursos de este 2009 se vean reducidos a la mitad.
Este verano, los seminarios se concentrarán en las últimas dos semanas de julio mientras que otros años los cursos abarcaban las cuatro semanas del mes durante las que se impartían un total de 11 seminarios de 30 horas de duración y un taller de fin de semana con una carga lectiva de 20 horas de duración.
Este recorte en el programa coincide con el décimo aniversario de esta iniciativa académica que la Carlos III, junto con el Ayuntamiento de Villablino ponían en marcha en julio de 1999.
A esta iniciativa se sumó, posteriormente, la Universidad de León así como la Fundación Sierra Pambley, cuyas instalaciones en Villablino son la sede del programa de verano. Aunque durante un par de años los cursos se impartieron en la Casa de Cultura.
Desde aquel lejano 1999 han pasado por los cursos de verano unos 3.500 alumnos así como cientos de profesores. Y es que la media de participación en los cursos es de 300 estudiantes por año, excepto en 2003, 2004 y 2005 donde el número de alumnos llegó a superar los 400 pues, esos tres veranos, se impartieron además de los seminarios de 30 horas de duración, talleres de fin de semana.
En las últimas tres ediciones sólo se mantenía el taller de música a cargo del tenor Enrique Viana y que coincidía con los encuentros musicales que el escultor y pintor, Eduardo Arroyo, organiza el último fin de semana de julio en Robles de Laciana.
Y mientras el programa de verano se mantiene, no sucede lo mismo con Unitínere, el Encuentro Universitario Itinerante de Artes Escénicas que, después de seis años acercando el mejor teatro a los pueblos de Laciana, este año cambia de sede y los ‘tratantes de sueños’ levantaran el telón en los pueblos de la Sierra Norte de Madrid, del 23 de julio al 1 de agosto.
Una noticia que, a buen seguro, caerá como un jarro de agua fría entre los habitantes de los pueblos de la comarca que, cada verano, recibían con los brazos abiertos la llegada de Unitínere.