Pues como baja agua, el rodesno aún gira y la maquinaria está en pleno funcionamiento, (hacen falta unos pequeños retoques únicamente, que seguro que Abilio nos realiza desinteresadamente y una vez la pimita se lo pida amablemente, que ya sabemos que él no le niega nunca nada a una fémina), con los consejos y ayuda de la pimi sobre fermentación y otras zarandajas, ponemos en marcha una explotación ecológica de hogazas, que el éxito está asegurado. lLin, hay que tapar el agua y echarla para el molino que si no no vas a moler y la semana que viene le toca moler al SEÑOR G.