..¡Qué días y quénoches!/
¡Con cuánta lentitud las horas ruedan/
Por encima del alma que está sola/
Llorando en las tinieblas!/
Las sales de mis lágrimas amargan/
El pan que me alimenta;/
Me cansa el movimiento, /
Me pesan las faenas/
La casa me entristece/
Y he perdido el cariño de la hacienda/..
Bonita poesía y bonito Saelices de Payuelo.M. Estatua dedicada a la tenacidad y constancia de la mujer trabajadora de este pueblo.
Yo aprendí en el hogar en qué se funda
La dicha más perfecta,
Y para hacerla mía
Quise yo ser como mi padre era,
Y busqué una mujer como mi madre
Entre las hijas de mi hidalga tierra.
Y fui como mi padre, y fue mi esposa
Viviente imagen de la madre muerta.
¡Un milagro de Dios, que ver me hizo
Otra mujer como la santa aquella!
Compartían mis únicos amores
La amante compañera,
La patria idolatrada,...