Otra maravilla de la
naturaleza,
flor con los tres clavos, manos y pies de Jesús y la corona de espinas, belleza sin igual. En mi
patio, o
corral como decimos en mi zona, y en
León, me encanta contemplarla tan de cerca, no se hiela en
invierno y ofrece
flores y flores, los
frutos son comestibles, dan lo que son, y nosotros agradecidos a tanto regalo gratuito. Aprendamos generosidad.